Sin duda que el embrujo que nos produce el ajedrez es tan sublime, que nos hace sentirnos grandes creadores durante unos minutos, y a eso se refiere Marcel Duchamp cuando dice: "No todos los artistas son ajedrecistas, pero todos los ajedrecistas son artistas".

Sin duda, también, que el ajedrez no lo es todo. ¿Qué decir de la música, por ejemplo? Por eso os he dejado una pequeña muestra de mi música favorita, para que la disfrutéis, si os apetece, mientras os sumergís en el fascinante mundo del ajedrez.

Ya en su dia el gran Tarrasch dijo: "Como el amor, como la música, el ajedrez tiene la virtud de hacer felices a los hombres".

Y olvidémonos de aquella otra frase de Oscar Wilde que decía: "Si quieres destruir a un hombre, enséñale a jugar al ajedrez"...¡asusta!

Así que sin más dilación comenzemos este singular viaje a una tierra llena de peligros, en la que nos encontraremos a reyes enfrentados en un combate eterno, reinas poderosísimas y despiadadas, fortalezas sólidas e inexpugnables, obispos con gesto serio y mirada oblícua, ágiles corceles dispuestos a asestar coces mortales y valientes guerreros que nunca retroceden ante nada.

Estáis todos invitados, así que los que quieran pueden subir a bordo. Sin condiciones. Durante la travesía seremos testigos de inagotables maravillas y al llegar a puerto nos espera...la felicidad, sin duda.

BIENVENIDO. GRACIAS POR VISITAR MI BLOG.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Árbol de Navidad


   Como siempre en estas fechas, Papa Noel, un vez más, después de todo un año de intenso trabajo y preparación, ha repartido regalos a lo largo y ancho de todo el mundo, llenando de alegría e ilusión el corazón de muchos niños y mayores. Todos aquellos que durante este año que ahora termina se han portado bien, al levantarse la mañana de Navidad se habrán encontrado a los pies del árbol navideño, profusamente adornado de luces y guirnaldas, algún obsequio que le permitirá comprobar que Papa Noel se ha acordado de él y ha valorado su buen comportamiento.
Este año no había escrito ninguna carta a Papa Noel, es la verdad, pero supongo que sus ayudantes, los duendecillos, que siempre están al tanto de todo, le habrán hablado de este blog al bueno de Santa, y ayer, al levantarme, pude ver con asombro, que junto al árbol de Navidad había una pequeña caja de color verde con un lazo azul y una etiqueta en la que se podía leer: "Compártelo con todos tus amigos del blog".


    Al abrirla, me reveló una grata sorpresa. Y es que, mis queridos amigos seguidores del blog, Papa Noel, nos había dejado dentro una curiosa y original colección de problemas ajedrecísticos con un denominador común: ¡todas las posiciones tienen forma de árbol de Navidad!. Y tal y como ponía en la etiqueta, a continuación paso a haceros partícipes de todas ellas.

   En este primer problema, las blancas juegan y dan mate en dos jugadas:


SOLUCIÓN
1.Cxc4 y ahora si a)1...,Txe3; 2.Dxe3++. b)1...,dxc4; 2.Dxc4++. c)1...,fxg4; 2.Dxg4++. d)1...,Te5; 2.Txe5++.


   En el segundo problema, las blancas juegan y dan mate, otra vez, en dos jugadas:


SOLUCIÓN
1.Rxd7 y ahora a)1...,c2; 2.Da1++. b)1...,e2; 2.Dg1++. c)1...,c4; 2.Ce6++. d)1...,e4; 2.Cc6++.


   En el tercer problema, de nuevo las blancas juegan y dan mate en dos movimientos:


SOLUCIÓN
1.f8(=C)+,Rxf6; 2.dxe8(=C)++.


   Para el cuarto problema, tenemos una composición creada en 1975 por el ajedrecista estadounidense de origen húngaro, nacido en 1928, Pal Benko, en la que las blancas juegan y dan mate en dos:


SOLUCIÓN
1.Dc5, con las posibles continuaciones a)1...,Txc5; 2.Cd4++. b)1...,dxc5; 2.Te5++. c)1...,Rxf5; 2.Dxd5++. d)1...,Txe4; 2.Dxd5++. e)1...,Axe4; 2.Cf4++.

   En el quinto problema, las blancas juegan y dan mate en tres jugadas:


SOLUCIÓN
1.Dd1, y ahora a)1...,Rf4; 2.Cxg2+,Re4; 3.Dd3++. b)1...,Tb8 ó Cd5 ó dxe5 ó Axe5; 2.Dd3+,Rf4; 3.Cxg2++.

   Y para el sexto y último problema, podemos disfrutar de una composición de T.R. Dawson del año 1914, en la que las negras juegan y dan mate en dos jugadas. Aunque pueda parecer que hay dos soluciones equivalentes, sólo existe una única solución, para lo cual hay que hacer uso de un sencillo análisis retrógado de la posición. Para explicarlo mejor le cedo por un momento la palabra a Harry Golombek (1911-1995), el famoso autor de "La enciclopedia Golombek del ajedrez": "Hay que utilizar el análisis retrógado cuando es preciso saber cómo se ha obtenido la posición reflejada en el diagrama (si se ha llevado a cabo o no un enroque, si la captura al paso ha sido legal, etc.). Por tanto, se analizan las jugadas anteriores a la aparición de la posición, hasta que se obtiene la prueba deseada". Debo aclarar que me he permitido la libertad de invertir la posición del tablero, ya que en la composición original, las blancas son las que daban el mate en dos al rey negro situado en 'e8', por lo que en un principio la posición tenía forma de árbol de Navidad invertido. Espero que T.R. Dawson, su autor, me disculpe la licencia. Y sin más, os dejo con el problema en donde, os recuerdo, las negras juegan y dan mate en dos jugadas:


SOLUCIÓN
1...,bxc3 a.p.; 2.axb3,c2++. La solución también podría haber sido 1...,fxe3 a.p.; 2.axb3,e2++, pero si la última jugada del blanco hubiera sido 1.e4, entonces el alfil blanco de 'f1' no hubiera podido moverse antes, por lo que se deduce que la última jugada blanca fué realmente 1.c4.

   Para terminar, os dejo a continuación una partida que dejó Papa Noel dentro de la caja y que muestra como en un enfrentamiento real también podemos encontrarnos con un bonito árbol de Navidad. La partida se disputo en Novi Sad, en el Campeonato de Europa por equipos de 2009 entre R. Dineley y E. L'Ami, en la que las negras se impusieron en el movimiento setenta y uno y cuya posición final es la que refleja el siguiente diagrama:


   Podéis seguir el desarrollo completo de la partida pinchando sobre la cruz

(Ver partida)(Ocultar)

   Me despediré con una frase del actor cómico estadounidense W.C. Fields (1880-1946) que dijo una vez: "La Navidad en mi casa es por lo menos seis o siete veces más agradable que en cualquier otro sitio. Empezamos a beber temprano, y cuando el resto de la gente ve un solo Santa Claus, nosotros vemos seis o siete". ¡Felices fiestas a todos!






viernes, 23 de diciembre de 2011

Peones asesinos

Philidor

   Los peones son el alma del ajedrez, dijo una vez François-André Danican Philidor, considerado el mejor jugador de ajedrez del siglo XVIII. Este genial jugador francés nacido en Dreux en 1726 y fallecido en Londres en 1795, fué además de un gran compositor de óperas cómicas en la época de Luis XVI, el autor del gran tratado de ajedrez, publicado en 1749, "Análisis del juego de Ajedrez", donde se demuestra hasta que punto sus ideas y su concepción del juego eran avanzadas para su época. Su figura va ligada a la defensa que lleva su nombre (1.e4,e5; 2.Cf3,d6), a una posición clasica en los finales de torre y peón contra torre y a dos sutiles maniobras de zugzwang en los finales de dama contra torre, por un lado, y torre y alfil contra torre, por otro.
El gran filósofo griego Aristóteles en su tratado "De anima" distinguía tres tipos de almas: la vegetativa, que ejerce las funciones de asimilación y de reproducción y que es propia de las plantas, la sensitiva, que además de las anteriores funciones también controla la percepción sensible, el deseo y el movimiento local, que es propia de los animales, y la racional, que además de las funciones de las anteriores almas, está capacitada para ejercer funciones intelectivas, y que es propia del ser humano.  Pero en esta clasificación se olvidó obviamente de otro tipo de alma: el alma asesina, que ejerce funciones aniquiladoras y que es propia de los peones sobre un tablero de ajedrez. Esta es su verdadera alma, que permanece mucha veces dormida, pero que cuando despierta es de una fuerza arrolladora, una fuerza que no tiembla un ápice cuando de dar muerte al rey contrario se trata.
Según las controvertidas investigaciones del doctor Douglas MacDougall, realizadas en 1927, toda persona pierde en el último minuto de su vida, 21 gramos, lo que según él, equivaldría al peso del alma humana que abandona el cuerpo físico. Después de ver los ejemplos que os presento a continuación, ¿seremos capaces de revelar cúanto pesa el alma de los peones...?

   Comenzaremos con una antigua partida disputada en Londres,1868, entre Bird y Steinitz:


   Aquí Bird podría haber dado mate en tres jugadas con 1.exd7+,Rf8; 2.De8+,Dxe8; 3.dxe8(=D)++, pero jugó 1.Dxh7, lo que permitió que pudieramos ver la cara del alma asesina del peón tras 1...,Tf8; 2.exf7+,Txf7; 3.Te1+,Ae7; 4.Dg8+,Tf8; 5.f7++.

   La siguiente posición corresponde a la partida Chablinsky-Ouchkal, URSS, 1974:


   Las blancas se impusieron rápidamente con 1.Ta3+!,bxa3; 2.b3++.

   El siguiente diagrama está sacado de la partida Durao-Catozzi, zonal de Dublín, 1957, y el turno es de las blancas que están en disposición de dar mate en tres jugadas. ¿Véis cómo?


SOLUCIÓN
1.Tf4+,Rh5; 2.Th4+!,gxh4; 3.g4++.

   En el siguiente ejemplo, tomado del encuentro Moldojarov-Samochanov, URSS, 1974, veremos como las negras no perciben la fuerza del alma asesina del peón 'g', hasta que es demasiado tarde:


   La partida siguió con 1.Tg6!,a4?!; 2.Re3,a3?!; 3.Rf4,a2; 4.Tg3!,Ae6 (evita el mate directo, pero no es suficiente para detener al peón...); 5.Th3+!,Axh3; 6.g3++.

   Prácticamente igual que a Samochanov, le ocurrió en el siguiente diagram de la partida List-Heymann, Inglaterra, 1951, al conductor de las negras:


   Sin percatarse del peligro el negro jugó 1...,e2??, y las blancas remataron con 2.Tb3,e1(=D); 3.Ta3+!,Axa3; 4.b3++.

   Otro bonito ejemplo es el podemos ver a continuación, correspondiente a la partida Prié-Giorgadze, Andorra, 1997:


   El blanco salió victorioso después de la sorprendente jugada 1.Ra3!!. Ante el mate con 2.Db4++, las negras pueden jugar 1...,Dc5+; 2.b4+!,Dxb4; 3.Dxb4++ ó 1...,b5; 2.Dd8+,Db6; 3.b4++, encontrándonos en este último caso, otra vez, con el peón asesino.

   A continuación veremos a dos ex-campeones mundiales en acción, en una partida disputada en Moscú, en 1967. Los protagonistas son Spassky-Petrosian:


   Es el turno de las negras, sobre las que pesa la amenaza de mate con b6++. Esta amenaza no puede rechazarse con 1...axb5, por 2.Cxb5+,Ra6; 3.Ta8++, por lo que Petrosian intentó 1...Axd4, pero tuvo que rendirse tras 2.Dxd4+!,Txd4; 3.b6++.

   La siguiente posición es de la partida Median-Sanz, Olot, 1975, y las blancas juegan y ganan. Teniendo siempre presente la fuerza del alma del peón, ¿encontraréis la solución?:


SOLUCIÓN
1.Cf5+!,Rh5 (si 1...,gxf5; 2.Dxf6+,Rh5; 3.Dg5++); 2.Dxh7+!,Cxh7; 3.g4++.

   En el siguiente diagrama correspondiente al encuentro Padevsky-Hildebrand, Gaevle, 1956, el turno es de las blancas, que anunciaron mate en cuatro jugadas. ¿Lo véis?:


SOLUCIÓN
1.Dxh6+!,Rxh6; 2.Th3+,Ch5; 3.Txh5+!,gxh5; 4.g5++.

   En el siguiente ejemplo de la partida Cromblehome-Damant, Bognor Regis, 1964, nos encontramos con una idea que ya hemos visto anteriormente. De nuevo saldrá a relucir el alma asesina del peón...


   1.Dh5+!,gxh5; 2.g5+,Dxg5; 3.hxg5++.

   En la siguiente posición veremos al gran Tartakower en acción, conduciendo las piezas negras, contra un aficionado, en una prtida disputada en París en 1933:


   El genial jugador polaco decidió el combate jugando 1...,Dd4+; 2.Rg3,Dg6+; 3.Dg4,Dgxg4+; 4.fxg4,De3+; 5.Rh4


   5...,g5; 6.Rh5,De6!; 7.Df5+, parece ganadora, pero Tartakower lo tenía todo calculado 7...,Dg6+!; 8.Dxg6+,fxg6++.

   En el encuentro Georgadza-Kuindji, Tifilis, 1973, se dió esta posición, que las negras acertaron a rematar expeditivamente. A estas alturas de la película, seguro que encontraréis la solución en un abrir y cerrar de ojos...:


SOLUCIÓN
1...,Df2+!; 2.Dxf2,Th5+; 3.Axh5,g5++.

   La posición siguiente se pudo ver en la partida Sparenberg-Thompson, Groninga 2009, y siendo el turno de las blancas, éstas, se impusieron rotundamente:


   El ataque final empieza con un elegante sacrificio de caballo 1.Cxf5!,Txe5 (si 1...gxf5; 2.Txf5+!,Re7 [2...,Rxf5??; 3.Df7+,Df6; 4.g4++]; 3.Te1+ y si 1...,Cxe5; 2.dxe5+,Txe5; 3.Ag7+,Rxf5; 4.Dg4++); 2.Ag7+,Rxf5; 3.g4+,Rg5; 4.Dc1+,Rh4


     Y la sombra del alma del peón aparece tras 5.Df4,De6; 6.Dg3+,Rg5; 7.f4++.

   Ahora viajamos hacia atrás en el tiempo y nos situaremos en el año 1619, en una partida disputada entre Greco y un aficionado. Es el turno de las blancas. ¿Descubriréis como remató la lucha Greco?:


SOLUCIÓN
1.Ae6+!,Rxe6; 2.De8+!,Cge7 (ó 2...,Cce7, 2...,De7); 3.d5++.

   Ahora se trata de descubrir como se impusieron las piezas blancas, que son mano, en la siguiente posición de la partida Opocensky-Hromadka, Kosice, 1931:


SOLUCIÓN
1.Txd5+!,cxd5; 2.Cd3+!,exd3; 3.f4++.

   Otro ejemplo de peón asesino lo tenemos en el encuentro Gipslis-Darznieks, URSS, 1962, en el que las blancas tienen atacado el caballo de 'f5', lo cual no es obstáculo para montar un ataque ganador:


   1.Txd5!,Dc7 (si 1...,Dxd5??; 2.Dxe7+,Rg8; 3.De8++ y en caso de 1...,Axf5; 2.Txd8+,Txd8; 3.Te1,Ae6; 4.Ac4!); 2.Td7!,Axd7 (única era 2...,De5; aunque las blancas tendrían ventaja ganadora tras 3.Df3,Tb8; 4.Txe7,Dxf5; 5.Te8+,Rg7; 6.Dg3+,Dg6; 7.Dxb8); 3.Dxe7+,Rg8; 4.Ch6+,Rg7; 5.Dxf7+,Rxh6; 6.Dxf6,Rh5


   7.Ae2+,Ag4; 8.Axg4+,Rxg4; 9.h3+,Rh5; 10.g4++.

   La siguiente posición de la partida Kraidman-Bouwmeester, Olimpiada de Tel Aviv, 1964, fué rematada brillantemente por el conductor de las piezas blancas:


   1.Df8+!,Df7 (si 1...,Tf7; 2.Dh8+,Tg7; 3.Td7! y si 1...,Rg6; 2.De8+); 2.Axe5+,Rxe5; 3.Dc5+,Rf6; 4.e5++.

   Una conclusión fácil y contundente tuvo lugar en la partida Ftácnik-Lein, 1983. Las blancas juegan y ganan. ¡Hay que encontrar la solución en tres segundos, sino no vale!


SOLUCIÓN
1.Tf6+!,gxf6 (si 1...,Rh7; 2.Th6++); 2.f5++.

   El próximo ejemplo es algo más difícil, pero seguro que también encontraréis la continuación ganadora que le dió un rápido triunfo al negro en la partida Schatz-Giegold, Hof, 1928:


SOLUCIÓN
1...,Dh7+; 2.Th3,Td1+; 3.Rh2,Th1+!; 4.Rg3 (o 4.Rxh1,Dxh3+),Dh4+!; 5.Txh4,gxh4++.

   En el enfrentamiento Vinogradov-Fedin, Moscú, 1973, se dió la siguiente posición:


   Las blancas se impusieron comenzando con un sacrificio de dama 1.Dxh6+,gxh6; 2.Txh6,Rg7; 3.Th7+,Rf8; 4.Th8+,Rg7; 5.Tg8+,Rh6; 6.g5++.

   Un nuevo caso de peón asesino lo encontramos en la lucha Uhmeier-Krüger, Neumünster, 1976:


   Las negras se impusieron contundentemente mediante 1...,Txd3+; 2.Txd3, Cbc4+; 3.Ra4,b5++.

   Si en un ejemplo anterior vimos a Petrosian caer víctima del peón asesino, en este caso será él el que liberará el alma asesina de su peón 'h' para anotarse la victoria en el enfrentamiento Petrosian-Ivkov, match URSS-Yugoslavia, 1979:


   El gran Tigran Petrosian, batió a su fuerte rival con 1.Txd4!,exd4 (1...Txd4 ó 1...,cxd4 no cambia nada); 2.Te5+,Rxg4; 3.h3++.

   Para terminar esta extensa entrada de hoy (ahora me he dado cuenta de que me he pasado un poco, pero es que cuando me pongo, me pongo...), lo haré con dos brillantes estudios del excelso compositor Leonid Kúbbel. En el primero de ellos, compuesto en 1934, veremos como las blancas se imponen de manera asombrosa:


   Las blancas podrían coronar el peón 'f', pero las negras amenazan al rey blanco con 1...,Dxf2+, así que empezaron con 1.Ce4, Df3 (para impedir la coronación blanca); 2.f8(=D)! (a pesar de todo),Dxf8; 3.Cf6!! (incomunica a la dama y evita 3...,Rxe5; por 4.Cd7+),gxf6; 4.f4! y no se puede evitar el mate con 5.c3++. En la jugada 3 del negro , hay otras alternativas pero ninguna les salva:
a) 3...,Db8; 4.c3+,Rxe5; 5.Cd7+ y 6.Cxb8. b) 3...,Dh8; 4.Cg4,Dh6+; 5.Cxh6,gxh6; 6.f4,h5; 7.c3++. c) 3...,Da8; 4.Cg4,Df3; 5.c3++. d) 3...,Dxf6; 4.exf6,gxf6; 5.f4 y 6.c3++.

   La segunda composición, que data de 1925, nos muestra una precisa y elegante solución que otorga la victoria a las blancas. Tratad de resolverla con tranquilidad,  para lo que os diré, a modo de pista, que es muy importante acertar con el primer movimiento, de ello depende la victoria o la derrota...:


SOLUCIÓN
1.e7! (si 1.b7?,Ac7; 2.e7,Af5+; 3.Rxc3,Axg6 y las negras ganan),Axe7; 2.b7,e4+; 3.Rxc3,Af6+; 4.Rb4!,Ae5; 5.g7,Ae6; 6.c4++.

   Me despediré, confiando en no haber aburrido a nadie con todos los ejemplos expuestos, con un profundo pensamiento sobre el alma del escritor irlandés, Premio Nobel de literatura en 1925 y ganador de un Óscar en la categoría de mejor guión, por Pigmalión, en 1938, George Bernard Shaw (1856-1950) que dijo: "Los espejos se emplean para verse la cara; el arte para verse el alma"


  

sábado, 10 de diciembre de 2011

Enrocarse...pero a su tiempo

    Una de las cosas que primero aprendemos al introducirnos en el fascinante mundo del ajedrez, es que al iniciar la partida, y en cuanto hayamos puesto en juego alguna de nuestras piezas, hemos de tener especial precaución en poner a buen recaudo a nuestro rey, para preservarlo de feroces ataques que le puedan sobrevenir, lo cual se consigue, obviamente, con el enroque. Este lance, único en el ajedrez en que se mueven en una sola jugada dos piezas, está recogido en todos los manuales de iniciación al juego como una maniobra que no hay que demorar, y que ha de hacerse previamente a emprender cualquier tipo de acción sobre el tablero, a fin de no dejar al rey en el centro donde podría ser fácilmente atacado por las huestes enemigas.

El enroque

   De todos modos, aunque tengamos a nuestro rey enrocado, eso no le garantiza que este exento de peligros, claro está, y en la amplia literatura de nuestro noble juego podemos encontrar un sinfín de obras en las que se recogen detalladamente los diferentes métodos de ataque sobre el enroque, ya sea el corto o el largo, como por ejemplo en el magnífico libro de Ludek Pachman, Táctica moderna en ajedrez, tomo II, donde dedica dos capítulos a este tema, y que podéis descargároslo pinchando en el siguiente enlace:



   A modo de ejemplo de un formidable ataque al enroque, podemos fijarnos en la siguiente posición sacada de la partida Miles-Browne, Olimpiada de Lucerna, 1982, donde las blancas juegan y ganan:


SOLUCIÓN
1.Axh7+!,Rxh7; 2.Dh5+,Rg8; 3.Axg7!,Rxg7 (si 3...,f6; 4.Dh8+,Rf7; 5.Axf8,Txf8; 6.Dh7+ y 7.Dxc7); 4.Dg5+,Rh8; 5.Df6+,Rg8; 6.Tc4!, y las negras abandonaron.

   La combinación anterior seguro que os habrá recordado a algunos, el fantástico ataque de Lasker contra Bauer en Amsterdam, 1889, donde el ex-campeón mundial introdujo por primera vez el clásico sacrificio de los dos alfiles contra el enroque enemigo:


   Las blancas jugaron aquí 1.Ch5, y las negras respondieron 1...,Cxh5, con la sana intención de defenderse después de 2.Dxh5 con 2...,f5, pero ahora Lasker enciende la mecha con 2.Axh7+!,Rxh7; 3.Dxh5+,Rg8; 4.Axg7!,Rxg7; 5.Dg4+,Rh7; 6.Tf3,e5 (única); 7.Th3+,Dh6


   Bauer pensó que entregando la dama su posición todavía podía defenderse pero... 8.Txh6+,Rxh6; 9.Dd7! y uno de los alfiles cae. Siguió 9...,Af6; 10.Dxb7,Rg7; 11.Tf1,Tab8; 12.Dd7,Tfd8; 13.Dg4+,Rf8; 14.fxe5,Ag7 (si 14...,Axe5; 15.Df5); 15.e6,Tb7; 16.Dg6,f6


   Y Lasker remató con 17.Txf6+!,Axf6; 18.Dxf6+,Re8; 19.Dh8+,Re7; 20.Dg7, y las negras abandonaron. ¡Esto sí que es atacar...!

   Otro de los ataques más famosos de la historia, con anécdota incluida, es el que se produjo en la partida disputada en Nueva York, 1912, entre Edward Lasker y George Thomas, cuyo comienzo refleja el siguiente diagrama:


   Edward Lasker alcanzó la gloria jugando 1.Dxh7+!!,Rxh7; 2.Cxf6+,Rh6 (si 2...,Rh8; 3.Cg6++); 3.Ceg4+,Rg5;


   4.h4+,Rf4; 5.g3+,Rf3; 6.Ae2+,Rg2; 7.Th2+,Rg1; 8.0-0-0++. La anécdota a la que hacía mención antes ocurrió cuando tras concluir la partida, se acercó a felicitar al vencedor, el campeón del mundo Emanuel Lasker (ambos jugadores no tenían parentesco ninguno a pesar de compartir el mismo apellido) y le dijo que la partida no había sido del todo correcta. Un poco mosqueado Edward Lasker respondió: "- Todas las jugadas del negro han sido forzadas. ¡Ni usted, como campeón mundial, podría haberlo superado!", a lo que Emanuel Lasker contestó: "- Con todos los respetos, sí lo hubiese superado. ¡Yo habría ganado dos jugadas antes!". Acto seguido le explicó que en vez de 4.h4+, la mejor jugada era 4.f4+!,Rxf4 (si 4...,Rh4; 5.g3+ y 6.Af1+); 5.g3+,Rf3 (si 5...,Rg5; 6.h4++); 6.0-0++. ¡Es de suponer, que a Edward no le haría mucha gracia la corrección de Emanuel!

   Para ilustrar un ataque contra el enroque largo, echaremos mano de otro ejemplo clásico correspondiente a la partida Schulder-Boden, Londres, 1860, donde las negras se impusieron rápidamente:


SOLUCIÓN
1...,Dxc3+!; 2.bxc3,Aa3++.

   De todos modos, a pesar de los ejemplos anteriores, no cabe duda que como más seguro está el rey es enrocado, porque la historia del ajedrez está plagada de reyes que sucumben, sin remisión, en el centro del tablero, donde su defensa, que duda cabe, es mucho más difícil. Para muestra los siguientes ejemplos, el primero de los cuales está sacado de la partida Tatai-Karpov, Las palmas 1977, donde el turno de juego es de las negras:


   Las blancas están a punto de enrocarse, pero el gran Karpov lo impidió jugando 1...,Dd3!; 2.exd3,exd+! Con este cambio se abre la columna 'e' y el rey blanco queda peligrosamente expuesto a las amenazas enemigas. 3.Rd2,Te2+ Las negras no se apresuran a recobrar la dama a fin de no dejarle al adversario ni una sola posibilidad de salvación. 4.Rxd3,Td8+; 5.Rc4,Txc2+; 6.Rxb4,Tcd2


   7.f3,Af8+; 8.Ra5,Ad7! y las blancas abandonaron. Karpov estaba amenazando 9...,Ac5 seguido de 10....,Ta8++. Si 9.Tc1,Td6! y a 9.b4,Td6; 10.b5,Tf6; 11.Ra4,Ae6; 12.Ra5,Ac4 y mate a la siguiente.

   El segundo ejemplo corresponde a la partida Reti-Tartakower, Viena, 1910, donde las blancas se impusieron expeditivamente. Es una posición muy conocida, pero ¿recordáis en este instante como Reti cazó al rey negro, todavía sin enrocar?:


SOLUCIÓN
1.Dd8+!!, y las negras abandonaron. Después de 1...,Rxd8; 2.Ag5+, el rey negro recibe mate con 2...,Re8; 3.Td8++ o bien 2...,Rc7; 3.Ad8++.

   Otro ejemplo lo podemos ver en el encuentro Bareev-Yakovich, URSS, 1986, en el que las blancas juegan y ganan:


SOLUCIÓN
1.Cxe6!!, y las negras se rindieron. Si 1...,Dxh5; 2.Cg7+,Rd8; 3.Te8++, y si 1...,fxe6; 2.Dxd5.

   Después de visto lo visto, y dando por supuesto que el enroque es un movimiento fundamental en casi todas las partidas, con el que nuestro rey se librará de más de un disgusto, volveré al título de la entrada de hoy, que me lo inspiró un bonito estudio que encontré en una vieja revista, cuyo autor es V. Prigunov, del año 1990. La verdad es que me he extendido un poco hasta llegar aquí, pero lo único que quería explicar es que admitiendo la importancia de enrocarse, el estudio que a continuación podréis ver, demuestra que, como todo en la vida, el enroque también hay que efectuarlo en el momento adecuado.
La composición de Prigunov es sencilla pero singular, y seguro que con la pista del título no tendréis dificultad en encontrar la solución. Se me olvidaba...las blancas juegan y ganan. ¡Suerte!


SOLUCIÓN
Después de 1.0-0?,Txh4, la posición es de tablas, pero enrocando a su tiempo, la cosa cambia: 1.e7+!,Rxf7; 2.e8(=D)+!,Rxe8; 3.f7+!,Rf8; 4.Ae7+!,Rxe7; 5.f8(=D)+!,Rxf8; 6.0-0+ y las blancas ganan. ¡Asombroso!

   Curiosamente, mientras buscaba material para la crónica de hoy, me encontré en el interesante libro de Joe Gallagher de la editorial Hispano Europea, "101 ideas de ataque", la siguiente posición que hace uso de la idea del estudio de Prigunov. Está sacada de la partida Berry-Teplitzky, Canadá, 1999:


   Es el turno de juego de las blancas, que se equivocaron jugando 1.Tc1?, a lo que el negro respondió 1...,Cxe3!. Y Berry entró de lleno en la combinación de Prigunov, continuando con 2.Txc7,Cxg4; 3.Txb7,0-0-0!! y las negras se anotaron el punto entero. La torre de 'b7' cae por la amenaza de mate en 'd1'. ¡La realidad emulando a la ficción!.

   Termino hoy con dos frases que se ajustan perfectamente a lo que hemos estado tratando. La primera es de Tartakower: "El enroque es el primer paso hacia una vida ordenada", y la segunda del gran jugador estadounidense Harry Nelson Pillsbury, que dijo: "Enroque porque quiere o porque debe, pero no porque puede".