Habíamos dejado a Fischer clasificado para los encuentros de candidatos donde debía medirse contra Taimanov en Vancouver. Las negociaciones con Larry Evans para ser su ayudante no tuvieron éxito porque Bobby ponía dos condiciones: durante el match, el ayudante no podía ejercer de periodista y no podía estar acompañado por su esposa. En lugar de ayudante, Bobby tenía a mano a Edmundson, que se ocupaba de todo, salvo de jugar al ajedrez. Bobby ni lo necesitaba. Taimanov fué a Vancouver acompañado por Vasiukov y Balashov, siendo el capitán de la delegación soviética Alexander Kotov. Taimanov no estaba contento con la sala de juego que era muy pequeña, y Fischer estuvo de acuerdo con él. Al no encontrar una sala que contentara a los dos, por fín, el presidente de la FIDE, Max Euwe, que se había desplazado hasta allí, tomo la decisión de que se jugara el match en el edificio de la Unión Estudiantil, que tenía una sala de cine para doscientos espectadores. Fischer, que ya estaba harto, dijo: "Juguemos, estoy dispuesto a hacerlo donde sea". Y de esta forma comenzó el encuentro, ganando Fischer las cuatro primeras partidas seguidas. Algo inaúdito en el mundo del ajedrez, teniendo en cuenta el nivel de su rival. Antes de empezar el match, Taimanov consideraba que sus posibilidades eran sólidas y ahora su principal pensamiento era poder conseguir, por lo menos, unas tablas. Pero en la quinta partida, sus esperanzas se desvanecieron, cuando en una posición igualada cometió el error más grande de su carrera, perdiendo una torre:
Taimanov-Fischer. Match de Vancouver, 1971. 5ª partida. |
Fischer aplazó la sexta partida con posición ganadora y Taimanov abandonó sin reanudarla. El escandaloso resultado final fué, por tanto, de 6-0 a favor de Fischer.Todo el mundo del ajedrez estaba sorprendido ante tal hazaña. Taimanov comentó tristemente: "Este match me recuerda a mi infancia. Errores de ese tipo los hacía únicamente de niño. Fischer introdujo unas novedades importantes en las aperturas de la segunda y cuarta partida. Ha merecido esta victoria, pero a mí todavía me queda mi música...".
En los otros matches Larsen había ganado a Uhlmann por 5,5 a 3,5., Petrosian a Hubner por 4 a 3 y Korchnoi a Geller por 5,5 a 2,5. Así que el próximo rival de Fischer sería Larsen, y el match se disputaría en los Estados Unidos, en la ciudad de Denver.
El jugador danés, durante el Interzonal de Palma de Mallorca del año anterior, comentó: "Creo que en 1972 seré el campeón del mundo. Ganaré a Fischer en semifinales, con un punto de diferencia". No podía imaginarse lo equivocado que estaba.
El match empezó el 6 de Julio, a las 16 horas, y Fischer se anotó la victoria en la primera, segunda y tercera partida. A pesar de ello, la gente no podía creer que ocurriera un nuevo milagro y que Fischer consiguiera otro 6-0 contra un jugador como era Larsen. Pero después volvió a vencer en la cuarta...:
Larsen-Fischer. Match de Denver, 1971. 4ªpartida |
Tras cuatro días de descanso hizo lo propio en la quinta. El 20 de Julio, Fischer venció en la sexta y volvió a repetir la hazaña. Había eliminado a dos fortísimos rivales ganando todas las partidas. Era un caso único en la historia del ajedrez. Contando las últimas rondas del interzonal de Mallorca, Bobby había enlazado dieciocho victorias seguidas.
En la otra semifinal, Tigran Petrosian había vencido a Korchnoi por 5,5 a 4,5, por lo que la final de candidatos para dilucidar quien retaría al campeón mundial, Boris Spassky, se disputaría entre Fischer y Petrosian, escogiéndose como sede del encuentro la ciudad de Buenos Aires, en Argentina. El duelo daría comienzo el 30 de Septiembre y hasta allí llegaron los dos contendientes, acompañado Petrosian por su esposa Rona, sus ayudantes Averbach y Suetin y en nombre de la Federacion de Ajedrez de la URSS, Baturinski. Durante la fiesta de apertura del match los periodistas preguntaron a Petrosian si el duelo iba a durar las doce partidas previstas. Tigran sonrió y contestó: "Quizás gane antes. Las victorias de Fischer no me has impresionado. Es un gran jugador pero no un genio". Fischer comentó: "Soy el mejor jugador del mundo y estoy aquí para demostrarlo.Llevo esperando este momento diez años, pero las maniobras soviéticas me ponían obstáculos para evitaar que llegase antes. Me marcharé de Buenos Aires antes de la partida 12".
La sala de juego tenía capacidad para mil espectadores. En una esquina se encontraba la mesa del árbitro Lothar Schmid, que se levantaba con frecuencia y pedía silencio. En medio del escenario estaban Petrosian y Fischer sentados a una mesa que fue hecha en un tiempo récord. Estaba previsto que jugasen en la célebre mesa donde jugaron Alekhine y Capablanca, pero los organizadores dijeron: "- Es mejor tener dos mesas célebres...".
Petrosian-Fischer, Buenos Aires, 1971 |
Después volvió a vencer en la octava y el 26 de Octubre tra imponerse también en la novena se proclamó oficialmente aspirante al máximo título. El resultado final del match fué de 6,5 a 2,5 y al final le había ganado cuatro partidas seguidas a Petrosian. Sólo un hombre le separaba de alcanzar su ansiado sueño, el entonces campeón del mundo Boris Spassky.
Taimanov, Larsen y Petrosian |
No transcurriría mucho tiempo para que Fischer disipara cualquier duda sobre sus posibilidades de ser campeón del mundo. Todo se resolvería unos meses más tarde en la capital de Islandia, Reikiavik, en lo que más tarde se conocería como el match del siglo.
Pero de eso ya hablaremos en la siguiente entrega. Hoy, antes de terminar, os dejo con una posición de la partida Fischer-Hook, correspondiente a la Olimpiada de Siegen de 1970, en la que las blancas, a la que les toca jugar, anunciaron en este momento un mate en siete jugadas. ¿Sabréis emular a Fischer?:
Y concluyo con una frase de Fischer: "El ajedrez es una guerra sobre un tablero. El objetivo es aplastar la mente del adversario". Suena duro, pero Fischer es Fischer...
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