Sin duda que el embrujo que nos produce el ajedrez es tan sublime, que nos hace sentirnos grandes creadores durante unos minutos, y a eso se refiere Marcel Duchamp cuando dice: "No todos los artistas son ajedrecistas, pero todos los ajedrecistas son artistas".

Sin duda, también, que el ajedrez no lo es todo. ¿Qué decir de la música, por ejemplo? Por eso os he dejado una pequeña muestra de mi música favorita, para que la disfrutéis, si os apetece, mientras os sumergís en el fascinante mundo del ajedrez.

Ya en su dia el gran Tarrasch dijo: "Como el amor, como la música, el ajedrez tiene la virtud de hacer felices a los hombres".

Y olvidémonos de aquella otra frase de Oscar Wilde que decía: "Si quieres destruir a un hombre, enséñale a jugar al ajedrez"...¡asusta!

Así que sin más dilación comenzemos este singular viaje a una tierra llena de peligros, en la que nos encontraremos a reyes enfrentados en un combate eterno, reinas poderosísimas y despiadadas, fortalezas sólidas e inexpugnables, obispos con gesto serio y mirada oblícua, ágiles corceles dispuestos a asestar coces mortales y valientes guerreros que nunca retroceden ante nada.

Estáis todos invitados, así que los que quieran pueden subir a bordo. Sin condiciones. Durante la travesía seremos testigos de inagotables maravillas y al llegar a puerto nos espera...la felicidad, sin duda.

BIENVENIDO. GRACIAS POR VISITAR MI BLOG.

lunes, 30 de enero de 2012

Cuatro años sin Bobby Fischer (III)


   Habíamos dejado a Fischer clasificado para los encuentros de candidatos donde debía medirse contra Taimanov en  Vancouver. Las negociaciones con Larry Evans para ser su ayudante no tuvieron éxito porque Bobby ponía dos condiciones: durante el match, el ayudante no podía ejercer de periodista y no podía estar acompañado por su esposa. En lugar de ayudante, Bobby tenía a mano a Edmundson, que se ocupaba de todo, salvo de jugar al ajedrez. Bobby ni lo necesitaba. Taimanov fué a Vancouver  acompañado por Vasiukov y Balashov, siendo el capitán de la delegación soviética Alexander Kotov. Taimanov no estaba contento con la sala de juego que era muy pequeña, y Fischer estuvo de acuerdo con él. Al no encontrar una sala que contentara a los dos, por fín, el presidente de la FIDE, Max Euwe, que se había desplazado hasta allí, tomo la decisión de que se jugara el match en el edificio de la Unión Estudiantil, que tenía una sala de cine para doscientos espectadores. Fischer, que ya estaba harto, dijo: "Juguemos, estoy dispuesto a hacerlo donde sea". Y de esta forma comenzó el encuentro, ganando Fischer las cuatro primeras partidas seguidas. Algo inaúdito en el mundo del ajedrez, teniendo en cuenta el nivel de su rival. Antes de empezar el match, Taimanov consideraba que sus posibilidades eran sólidas y ahora su principal pensamiento era poder conseguir, por lo menos, unas tablas. Pero en la quinta partida, sus esperanzas se desvanecieron, cuando en una posición igualada cometió el error más grande de su carrera, perdiendo una torre:

Taimanov-Fischer. Match de Vancouver, 1971. 5ª partida.
   En la posición que refleja el anterior diagrama, la quinta partida fué aplazada. El resultado esperado eran las tablas, pero en la reanudación ocurrió algo increible: 42.Axc5,Axc5; 43.Dxc5+,Rg7; 44.Tf1,De4; 45.Dc7+,Rh6 y ahora Taimanov jugó 46.Txf6??, con lo que Fischer ganó la torre y la partida tras 46...,Dd4+; 47.Tf2,Ta1+. ¡Increible, pero cierto!
Fischer aplazó la sexta partida con posición ganadora y Taimanov abandonó sin reanudarla. El escandaloso resultado final fué, por tanto, de 6-0 a favor de Fischer.Todo el mundo del ajedrez estaba sorprendido ante tal hazaña. Taimanov comentó tristemente: "Este match me recuerda a mi infancia. Errores de ese tipo los hacía únicamente de niño. Fischer introdujo unas novedades importantes en las aperturas de la segunda y cuarta partida. Ha merecido esta victoria, pero a mí todavía me queda mi música...".
En los otros matches Larsen había ganado a Uhlmann por 5,5 a 3,5., Petrosian a Hubner por 4 a 3 y Korchnoi a Geller por 5,5 a 2,5. Así que el próximo rival de Fischer sería Larsen, y el match se disputaría en los Estados Unidos, en la ciudad de Denver.


   El jugador danés, durante el Interzonal de Palma de Mallorca del año anterior, comentó: "Creo que en 1972 seré el campeón del mundo. Ganaré a Fischer en semifinales, con un punto de diferencia". No podía imaginarse lo equivocado que estaba.
El match empezó el 6 de Julio, a las 16 horas, y Fischer se anotó la victoria en la primera, segunda y tercera partida. A pesar de ello, la gente no podía creer que ocurriera un nuevo milagro y que Fischer consiguiera otro 6-0 contra un jugador como era Larsen. Pero después volvió a vencer en la cuarta...:

Larsen-Fischer. Match de Denver, 1971. 4ªpartida
   Larsen acababa de jugar 27.Tb1 y ahora Fischer remató la faena con un fortísmo ataque, empezando con 27...,Ch4!. Ahora si 28.Txc8,Txc8; 29.Dh3, parece que las blancas ganan una pieza, pero seguiría 29...,Tcf8; 30.Dxh4,Th6!, y las negras ganan la dama. Siguió 28.Dd3,Af5; 29.Rh1,f3!; 30.Cg3,fxg2+; 31.Rg1,Axe4; 32.Dxe4,Cf3+; 33.Rg2,Cd2 y las blancas abandonaron.
Tras cuatro días de descanso hizo lo propio en la quinta. El 20 de Julio, Fischer venció en la sexta y volvió a repetir la hazaña. Había eliminado a dos fortísimos rivales ganando todas las partidas. Era un caso único en la historia del ajedrez. Contando las últimas rondas del interzonal de Mallorca, Bobby había enlazado dieciocho victorias seguidas.
En la otra semifinal, Tigran Petrosian había vencido a Korchnoi por 5,5 a 4,5, por lo que la final de candidatos para dilucidar quien retaría al campeón mundial, Boris Spassky, se disputaría entre Fischer y Petrosian, escogiéndose como sede del encuentro la ciudad de Buenos Aires, en Argentina. El duelo daría comienzo el 30 de Septiembre y hasta allí llegaron los dos contendientes, acompañado Petrosian por su esposa Rona, sus ayudantes Averbach y Suetin y en nombre de la Federacion de Ajedrez de la URSS, Baturinski. Durante la fiesta de apertura del match los periodistas preguntaron a Petrosian si el duelo iba a durar las doce partidas previstas. Tigran sonrió y contestó: "Quizás gane antes. Las victorias de Fischer no me has impresionado. Es un gran jugador pero no un genio". Fischer comentó: "Soy el mejor jugador del mundo y estoy aquí para demostrarlo.Llevo esperando este momento diez años, pero las maniobras soviéticas me ponían obstáculos para evitaar que llegase antes. Me marcharé de Buenos Aires antes de la partida 12".
La sala de juego tenía capacidad para mil espectadores. En una esquina se encontraba la mesa del árbitro Lothar Schmid, que se levantaba con frecuencia y pedía silencio. En medio del escenario estaban Petrosian y Fischer sentados a una mesa que fue hecha en un tiempo récord. Estaba previsto que jugasen en la célebre mesa donde jugaron Alekhine y Capablanca, pero los organizadores dijeron: "- Es mejor tener dos mesas célebres...".

Petrosian-Fischer, Buenos Aires, 1971
 Fischer ganó la primera partida, y el fantasma de que Bobby pudiera volver a ganar todas las partidas seguidas, sobrevoló el escenario. Con esta victoria, Fischer conseguía encadenar diecinueve triunfos seguidos. Pero Petrosian logró vencer en la segunda partida, rompiendo así la increible racha de triunfos del americano. Más de un millar de personas que se encontraban en la sala, y otras dos mil que estaban fuera, aplaudían y gritaban ¡Petrosian, Petrosian!. Larry Evans, que ejercía esta vez de ayudante de Fischer dijo: "Bobby necesitaba esta derrota para bajarse de las nubes". Después vinieron una serie de tablas en la tercera, cuarta y quinta partida, y luego Fischer logró imponerse en la reanudación de la sexta partida, que había quedado aplazada con un peón de ventaja a su favor. Cabe resaltar la anécdota de que cuando Evans le dió a Fischer los análisis que había hecho de la posición aplazada, aquél le dijo: "Lo miraré cuando termine la partida". Realmente Fischer no necesitaba a nadie para jugar al ajedrez. Esa derrota fué el final de Petrosian que volvió a inclinar su rey en la séptima partida, que fué una auténtica obra de arte, de la que comentó el gran Miguel Najdorf: "Es una victoria fantástica. Nadie hubira jugado como lo ha hecho Fischer". Para que podáis opinar vosotros mismos, os dejo a continuación la partida, que el propio Fischer consideró como la mejor de todo el match:


   Después volvió a vencer en la octava y el 26 de Octubre tra imponerse también en la novena se proclamó oficialmente aspirante al máximo título. El resultado final del match fué de 6,5 a 2,5 y al final le había ganado cuatro partidas seguidas a Petrosian. Sólo un hombre le separaba de alcanzar su ansiado sueño, el entonces campeón del mundo Boris Spassky.


Taimanov, Larsen y Petrosian
   Bobby Fischer había logrado la increible proeza de arrollar a tres de los mejores jugadores de la época con una facilidad pasmosa y antes de su esperado duelo con Spassky, el ex-campeón Mijail Botvinnik comentó: "Ahora Spassky supera completamente a Fischer, de eso estoy convencido. Pero no podría pronosticar cómo terminará su duelo, porque han ocurrido últimamente varios milagros en el mundo del ajedrez. Spassky es un ajedrecista más completo, mejor psicólogo y lo ha demostrado en muchas ocasiones. ¿Podrá Fischer llegar a ser  el campeón del mundo? Hace unos años yo decía que sí, si empieza a ganar a los mejores grandes maestros. Ahora lo hace". El gran maestro Kotov por su parte no estaba del todo de acuerdo con la opinión de Botvinnik, y opinaba: "Fischer es un genio del ajedrez al que hay que respetar. Tienen una formación ajedrecística  muy buena, es un auténtico académico en ese campo y todo el tiempo libre lo pasa leyendo libros de ajedrez. Sobre ajedrez lo sabe prácticamente todo. Spassky tiene unos entrenadores excelentes. Mi pronóstico es que va a ganar a Fischer, pero en una lucha muy difícil".
No transcurriría mucho tiempo para que Fischer disipara cualquier duda sobre sus posibilidades de ser campeón del mundo. Todo se resolvería unos meses más tarde en la capital de Islandia, Reikiavik, en lo que más tarde se conocería como el match del siglo.
   Pero de eso ya hablaremos en la siguiente entrega. Hoy, antes de terminar, os dejo con una posición de la partida Fischer-Hook, correspondiente a la Olimpiada de Siegen de 1970, en la que las blancas, a la que les toca jugar, anunciaron en este momento un mate en siete jugadas. ¿Sabréis emular a Fischer?:


SOLUCIÓN
1.Axc5+,Txc5; 2.Txe6+,Rf8; 3.Df6,Txe5+; 4.Txe5,Dxe5+; 5.Dxe5,f6; 6.Dc7,f5; 7.Td8++.

   Y concluyo con una frase de Fischer: "El ajedrez es una guerra sobre un tablero. El objetivo es aplastar la mente del adversario". Suena duro, pero Fischer es Fischer...



domingo, 29 de enero de 2012

Cuatro años sin Bobby Fischer (II)


   Continúo con el homenaje que con motivo del cuarto año del fallecimiento del genial Bobby Fischer inicié en la entrada anterior, que concluyó con su cuarto puesto en el Torneo de Candidatos de Curaçao del año 1962, que provocó unas duras críticas vertidas contra los jugadores soviéticos, a los que acusó de acordar tablas de antemano entre ellos para así no desgastarse en demasía, y que supuso que Fischer se negara a jugar más en los torneos correspondientes al campeonato mundial, pese a que la FIDE (Federación Internacional de Ajedrez) a raíz de esos comentarios críticos decidiera cambiar el sistema, pasando del Torneo de Candidatos a matches individuales, para evitar así, tal como dijo Ficher, los posibles resultados amañados de las partidas.
El siguiente torneo que jugó en 1962, fue la Olimpiada de Varna en donde se produjo un enfrentamiento que el mundo del ajedrez estaba esperando ansioso desde hacía mucho tiempo: su encuentro contra el campéon del mundo, el legendario Mijail Botvinnik. Bobby, con negras, tras una emocionante partida, llegó al aplazamiento con un peón de más en un final de torres, que el americano estaba seguro que iba a ganar.

Botvinnik-Fischer, Olimpiada de Varna, 1962
   El propio Fischer le comentó a su amigo, el periodista Dimitri Bjelica, que en la partida, Botvinnilk se había escabullido, pero que el final lo tenía perdido. Los análisis de la posición se prolongaron toda la noche y al día siguiente, Bjelica le preguntó a Botvinnik cual era su pronóstico a lo que contestó: "Probablemente todo está perdido". Pero Geller, que era el que más análisis había hecho, afirmaba que la partida podía acabar en tablas, sin importar si Bobby había hecho, como secreta, su mejor jugada. Todo el equipo norteamericano estuvo haciendo análisis durante mucho tiempo, y Benko descubrió una trampa que dejaba a Botvinnik una posibilidad de hacer tablas. Bobby no había realizado su mejor jugada secreta y aprovechando la citada trampa, Botvinnik consiguió arrancar las tablas, lo que provocó que Fischer abandonara rápidamente la sala sin poder disimular su gran enfado.
Podéis seguir el desarrollo de esta histórica partida a continuación:


   De esta Olimpiada está sacada la siguiente posición de la partida Unzicker-Fischer, donde el genio de Pasadena, al que le correspondía jugar, remató la lucha rápidamente. ¿Sabéis cómo?:


SOLUCIÓN
1...,Txc3; 2.Txa2,Tf3+; 3.Re2 (Si 3.Rg2,Df2+; 4.Rh1,Dxe1+ y 5...,Tf2++),Tf2+; 4.Rd3,Dxa2, con posición ganadora. Aún más elegante era 4...,Dc7!, amenazando mate en 'c2' (5.Tc1,Axc1; 6.Cxc1,Dxc1).
  
   Dos años más tarde, en 1964, consiguió un hito histórico al ganar el Campeonato de los Estados Unidos venciendo en las once partidas que jugó, recibiendo un premio de dos mil dólares. Para comprender la magnitud de la hazaña basta decir que más de la mitad de los participantes de ese torneo tenían el título de gran maestro, entre los que se encontraban Reshevsky, Benko, Evans, Byrne, Bisguier, Mednis...Pero después de este rotundo éxito no participó, tal como ya había dicho, en el Torneo Interzonal de Amsterdam, ni tampoco en la Olimpiada de Tel Aviv, al negarle los cinco mil dólares que pidió por jugar en el equipo nacional, dedicándose durante ese año de 1964 a realizar simultáneas por todos los Estados Unidos.
Así, retirado durante unos meses de la alta competición, su reaparición en la arena internacional ocurrió en el Torneo de La Habana de 1965. Antes de empezar dicho torneo Bobby Fischer y el presidente cubano Fidel Castro intercambiaron unos telegramas. El primero de Fischer a Castro decía: "Dirijo mi protesta contra la noticia publicada hoy en el "New York Times", en la que se hace mención a una especie de victoria propagandística y, en estas circunstancias, me veo obligado a retirarme del Torneo Conmemorativo de Capablanca. Acudiré al torneo sólo bajo la condición de que envíen inmediatamente un telegrama declarando que ni usted ni su Gobierno harán de ello un capital político y que en el futuro no aparecerá ningún comentario político relacionado con mi participación". El segundo fué la respuesta de Fidel Castro a Fischer, con el siguiente texto: "Acabo de recibir su telegrama. Estoy sorprendido porque me atribuye cierto tipo de comunicado relacionado con su participación en el torneo. No he dicho ni una sola palabra sobre ello. Lo conozco únicamente por su comunicado telegráfico a través de una agencia periodística estadounidense. Nuestro país no necesita "victorias propagandísticas" de ese tipo. Es asunto suyo si quiere participar o no en el torneo. Pero sus palabras son injustas. Si tiene miedo o quiere cambiar de parecer y no jugar será mejor que se busque otro pretexto y tenga el valor de ser honesto". Finalmente del Departamento de Estado de Estados Unidos no le concedió el visado a Fischer para viajar a Cuba y éste acepto jugar el torneo a través del telégrafo. Bobby jugaba desde la sala del club de ajedrez Marshall de Nueva York y sus jugadas eran enviadas a La Habana, a 2000 kilómetros de distancia. Al final, el torneo lo ganó Smyslov, y Fischer, jugando de esta curiosa forma, compartió el segundo puesto con Ivkov y Geller.
 De este singular torneo os dejo la partida que Fischer ganó al que al final resultaría vencedor del torneo, el ex-campeón mundial Vassily Smislov:


   Y de ese mismo torneo es la siguiente posición de la partida Doda-Fischer, donde las negras, a las que les toca jugar, se impusieron rápidamente:


SOLUCIÓN
1...,Da1+!, que lleva al mate. Si 2.Tf1 (2.Af1,Tg1++),Cxf1, y las negras amenazan la devastadora jugada 3...,Cg3, mate a la descubierta.

   Posteriormente ganó el Campeonato de los Estados Unidos de 1965, con un punto de ventaja sobre Reshevsky y Byrne. En 1966, quedó segundo, por detrás de Spassky, en el Torneo de Santa Mónica, conocido como la Copa Piatigorsky, que organizaba la esposa del famoso violonchelista y que tenía el mayor fondo de premios de toda la historia, hasta ese momento, con más de setenta y cinco mil dólares, en el que se enfrentaron los ocho jugadores más fuertes de entonces. Después de la primera vuelta del torneo, Fischer estaba penúltimo en la clasificación, pero una gran remontada le llevó a empatar en la tabla con Spassky antes de su enfrentamiento con este último. Durante la partida que les enfrentó casi mil personas llenaron la sala Nautilus del hotel Miramar, donde se jugaba el torneo. Nunca antes había habido tantos espectadores como en esa penúltima ronda. La partida acabó en tablas y en la última ronda Spassky se llevó el torneo al ganar a Donner, mientras que Fischer entabló con Petrosian.

Fischer-Castro, Olimpiada de La Habana,1966.
   La siguiente cita de Fischer fué la Olimpiada de la Habana de 1966. En la segunda ronda , el sábado 5 de noviembre, estaba programado el encuentro URSS-EEUU. Estaba previsto que la partida entre Fischer y Petrosian comenzase a las 18 horas, porque en aquel momento se terminaba el "sabath" de Fischer, ya que éste respetaba la tradición judía. Pero surgieron problemas porque las demás partidas  empezaban a las 16 horas y el capitán del equipo soviético no aceptaba que la partida del primer tablero empezase con dos horas de retraso. Los americanos realmente hicieron acto de presencia a las 18 horas, y el árbitro les apuntó la derrota de 0:4. Su capitán, Donald Byrne, llamó urgentemente al presidente de la Federación de Ajedrez de los Estados Unidos, Eidmund Edmundson, que amenazó con retirar su equipo de La Habana. En aquel tiempo "El noticiero de Moscú" escribió: "Fischer es muy conocido ya hace tiempo por su comportamiento extravagante. La gente esperaba que iba a cambiar, puesto que ya es un adulto, pero...". Al día siguiente el presidente de la FIDE, Folke Rogard, propuso un acuerdo amistoso, y los soviéticos aceptaron celebrar el encuentro el 14 de noviembre. Al final el encuentro terminó con la victoria de la URSS por 2,5 a 1,5, logrando Fischer unas tablas en el primer tablero donde se enfrentó finalmente contra Spassky.
El 19 de Noviembre Fischer jugó una partida amistosa contra el presidente cubano Fidel Castro, momento que recogen las fotografías anteriores, en la que el dirigente isleño salió vencedor, y tras la partida Bobby le regaló su libro autografiado "Fischer os enseña a jugar al ajedrez". Finalmente el equipo soviético ganó la Olimpiada con cinco puntos por delante de los americanos, que ocuparon la segunda plaza. Al final Petrosian fué el mejor primer tablero con un 88,45%, por delante de Fischer con un 88,22% de los puntos.
   Después de ganar los Torneo de Mónaco y Skopje de 1967, llegó el escándalo del Torneo Interzonal de Sousse, en Túnez, donde Fischer, por discrepancias con la organización, abandonó el torneo cuando iba lider, y en donde se jugó la famosa partida contra Reshevsky en la que Fischer llegó a la sala de juego cuando le quedaban menos de diez minutos para que le cayera la bandera y consiguió alzarse con el triunfo ante el asombro de propios y extraños. Podéis ver esa partida a continuación:


   Siguiendo con su comportamiento polémico, al año siguiente, en 1968, abandonó la Olimpiada de Lugano, descontento con la ilumminación y las condiciones de juego en la sala del torneo, por lo que el equipo norteamericano sólo consiguió un cuarto puesto. En 1970 se disputó en Belgrado el enfrentamiento URSS-Resto del Mundo, donde eludiendo toda polémica, Fischer accedió a jugar en el segundo tablero, cediendo el primero a Larsen, y donde se enfrentó a Petrosian, con un resultado particular de 3:1 a su favor, pero que en el cómputo general ganó la URSS por 20,5 a 19,5. Acto seguido participó en el Torneo de Herceg Novi de partidas rápidas,  donde se enfrentaron once grandes maestros y un maestro internacional a partidas de cinco minutos, logrando un holgado triunfo al conseguir 19 puntos de un total de 22, seguido en segunda posición por Tal, que logró 14,5 puntos. Más tarde, en ese mismo año, 1970, venció en el Torneo de la Paz, celebrado entre Rovinj y Zagreb, con dos puntos de ventaja sobre Gligoric, y después jugó el Torneo de Buenos Aires, en el que, entre otros, participaron jugadores de la talla de Tukmakov, Panno, Mecking, Reshevsky, Najdorf, Smyslov...

Smyslov, Najdorf, Panno y Fischer, Buenos Aires, 1970
   Fischer se alzó con el triunfo consiguiendo una puntuación de 15 de 17 puntos, superando al segundo clasificado, Tukmakov, en 3,5 puntos.
En este torneo, y llevando las piezas blancas, llegó a la situación reflejada en el siguiente diagrama en su partida contra Panno. Es el turno de Fischer. ¿Cómo consiguió la victoria?. ¡Es muy fácil!:


SOLUCIÓN
1.Dh7+,Rf8; 2.Dg8++.

   Posteriormente, en la Olimpiada de Siegen de 1970, la última en la que participó Fischer, sufrió una amarga derrota contra Spassky, que llevando las blancas logró vencerle en treinta y nueve jugadas. Al terminar la partida, Fischer, abatido, se levantó de la mesa y dijo en voz baja: "Tengo que esperar a la próxima oportunidad. Spassky tuvo suerte". El sueño de vencer a Spassky por primera vez en su carrera aún se demoraría un tiempo.
   Poco después, en el Congreso de la FIDE, se habló sobre la posibilidad de permitirle a Fischer la participación directa en el torneo Interzonal. No había participado en los dos últimos torneos: el de Amsterdam de 1964, donde se negó a jugar, y el de Sousse de 1967, donde abandonó el torneo cuando iba lider. Bobby perdió la votación, pero aún quedaba una última posibilidad, que era que uno de los tres jugadores estadounidenses ya clasificados, desistiese y Fischer ocupara su puesto en el Interzonal de Mallorca. Y eso es lo que ocurrió, ya que Benko cedió su puesto a Fischer por una buena compensación económica que le dió la Federación de Ajedrez de los Estados Unidos.

Pal Benko
   Bobby Fischer sabía lo que le debía a Benko por brindarle la oportunidad de luchar por conseguir su sueño de toda la vida, ser campeón del mundo, y a los dos les unió una amistad para toda la vida.
Y así fué como Robert James Fischer se encontró jugando el Interzonal de Palma de Mallorca de 1970. En la primera ronda sólo consiguió tablas contra la Caro-Kann de Hubner y en la segunda ganó a Smyslov. En la tercera ronda consiguió una rápida victoria contra Addison. Luego ganó a Filip, Hort y Reshevsky y después de la sexta ronda era claramente primero con 5,5 puntos. Siguieron unas tablas con Matulovic y la primera y última derrota en el torneo: contra Bent Larsen. Antes de su encuentro contra Geller, éste iba lider con 8 puntos, seguido de Fischer con 7,5. Bobby había perdido sus tres últimas partidas contra Geller, que después de siete jugadas ofreció tablas. Fischer sonrió ante dicha oferta y después de dos jugadas Geller tuvo serias dificultades y necesitó una hora para ejecutar la siguiente jugada. La partida fué aplazada con un peón de menos para Geller, que perdió en la reanudación en la jugada 71. De esta forma, Fischer se colocó otra vez en el primer puesto y se quedó allí hasta el final. Logró una impresionante victoria con 3,5 puntos de ventaja sobre sus más inmediatos perseguidores: Larsen, Geller y Hubner, y 4,5 sobre los siguientes: Taimanov y Uhlmann. A tenor de este resultado, el gran Miguel Najdorf comentó: "A partir de ahora Bobby Fischer tendrá que dar a todos dos puntos de ventaja al principio de cada torneo, para que sea más interesante...".
Seguidamente podéis disfrutar de la partida Geller-Fischer, de este Interzonal:


   De este modo, quedaron determinados los encuentros de candidatos al título mundial que ostentaba Spassky y que darían comienzo en mayo de 1971. Korchnoi jugaría con Geller en Moscú., Larsen y Uhlmann en Las Palmas, Petrosian y Hubner en Sevilla y Fischer contra Taimanov en Vancouver.
El camino para llegar ante Spassky comenzaba para Fischer, pero eso lo trataremos en la siguiente entrega...La de hoy la cerraré con una frase de Fischer que muestra claramente su forma de ser, cuando dijo: "Soy un individuo detestable. Mis ideales son el ajedrez y el dinero. Quiero ser riquísimo. Todos quieren serlo, pero ninguno lo dice. ¿Es pecado?".


  

domingo, 22 de enero de 2012

Cuatro años sin Bobby Fischer (I)


   El pasado día diecisiete, se cumplieron cuatro años de la muerte del que seguramente sea el mejor jugador de la historia del ajedrez, el incomparable Robert James Fischer, y por tal motivo aprovecharé  la ocasión para tratar de rendirle, desde estas líneas del blog, un modesto homenaje a tran gran figura. Cuando nació un nueve de marzo de 1943, a las 14.39 horas, en el hospital "Michael Reese" de Chicago, en el Estado de Illinois, nadie podía imaginarse que aquel niño, años más tarde, se convertiría en la mayor leyenda del ajedrez, en el jugador mítico que estaba llamado a cambiar las estructuras de este milenario juego y en el personaje más carismático y enigmático del tablero damasquinado. En 1949 la familia de Fischer se trasladó a vivir a Nueva York, y en el bajo del edificio de cuatro pisos donde se instalaron, se encontraba una tienda de dulces. Allí su hermana Joan, que por entonces tenía once años, compró unas figuras de curioso aspecto, según sus propias palabras, y le enseñó los primeros movimientos a Bobby, que tenía seis años, siguiendo las instrucciones que iban con el ajedrez. A partir de entonces, el ajedrez se convirtió en una obsesión para ese niño. Empezó a estudiar un libro que contenía muchos problemas, según contó más tarde su madre Regina Vender, y desde que se hizó con ese libro, ya ni contestaba cuando alguien se dirigía a él. Viendo los progresos que hacía su hijo y la facilidad con que derrotaba a su hermana Joan, Regina escribió en 1951 una carta a la revista "El Águila", de Brooklyn, solicitando ayuda para su hijo, y el redactor de la sección de ajedrez, Herman Helms, le aconsejó que llevara a Bobby a la biblioteca de Brooklyn donde encontraría algunos chicos con los que jugar y en donde iba a disputar unas simultáneas el maestro Max Pavey. Bobby perdió en quince minutos la dama y la partida, pero allí, Regina encontró al primer profesor de ajedrez de Fischer, el presidente del Club de Ajedrez Brooklyn, Carmine Nigro. Bobby se hizo miembro del club y fué perfeccionado su juego junto a los otros alumnos del Sr. Nigro. El maestro Harold Suesman también daba clases a un grupo de chicos, y la primera partida oficial de Fischer se produjo en un enfrentamiento entre estos dos grupos: por una parte los de Carmine Nigro y por otra los de Suesman. Ganó el grupo de Fischer por 5 a 3, consiguiendo Bobby una victoria y unas tablas con Raimund Suesman, el hijo del profesor de ajedrez. La leyenda acababa de comenzar...


   En 1956 consiguió su primer éxito de importancia al ganar el Campeonato Juvenil de los Estados Unidos, disputado en Filadelfia, ganando ocho partidas, empatando una y perdiendo otra, y como premio le dieron una máquina de escribir. Poco después, con trece años de edad,  participó en el Torneo de Rosenwald de Nueva York, donde consiguió su famosa victoria, conocida como "la partida del siglo", frente a Donald Byrne, al que venció en cuarenta y una jugadas sacrificando valientemente la dama, y que Fischer la consideró siempre una de sus favoritas.
   A continuación os dejo una imagen de la planilla original de la referida partida, escrita por la mano del propio Fischer y después la partida para que la podáis disfrutar.



   En 1958 se convirtió en el Gran Maestro más joven de la historia (hasta ese momento, claro) al terminar sexto en el Torneo de Portoroz y clasificarse así, con tan sólo quince años, para el Torneo de Candidatos, que se disputaría al año siguiente en Bled, y que junto con Tal, Gligoric, Benko, Petrosian, Olafsson, Keres y Smyslov, iba a decidir el rival del campeón Botvinnik. Allí acabaría en un discreto sexto lugar, y es que Fischer aún no estaba preparado para luchar realmente por lo que se había convertido en su sueño: llegar a ser campeón mundial.
Más tarde participó en la Olimpiada de Ajedrez en Leipzig, en 1960, donde se vivieron dos divertidas anécdotas con Tal. La primera ocurrió después de su partida, que termino después de una gran lucha en tablas, de la que dijo Ficher: "Tal no ha jugado mal", a lo que el propio Tal respondió: "Es la primera vez que Bobby reconoció que no juego mal, después de siete encuentros que tuvimos. De haber ganado, por una casualidad, esta partida, quizás dijese que mi juego es genial", y la segunda anécdota ocurrió durante el banquete de clausura, cuando Fischer se acercó un momento a Tal y le pidió que le permitiese leerle la mano. Tal le dió la mano y Fischer le "leyó" su destino ajedrecístico: "-Usted es un jugador extraordinariamente bueno. Incluso le veo el título de campeón mundial, pero aquí pone que va a perder ese título contra un joven gran maestro de Estados Unidos". Fischer, naturalmente, estaba pensando en sí mismo, pero Tal reaccionó rápidamente y le dió enseguida la mano a Lombardy, integrante del equipo americano, y le dijo: "-Te felicito, William, porque eso quiere decir que tú vas a ser el nuevo campeón del mundo".
Después jugó el gran Torneo internacional de Bled, en 1961. Bobby reservó, con dos meses de antelación, la misma habitación en el hotel Toplice donde estuvo alojado durante el Torneo de Candidatos. Antes de empezar la segunda ronda, en vísperas de su partida más importante, la que iba a jugara contra Mijail Tal, estuvo dando un paseo por el lago Bled en barca con el famoso periodista Dimitri Bjelica, gran amigo de Fischer, que cuenta que estuvo muy sumido en sus pensamientos, y sólo decía de vez en cuando: "-Me vengaré de él". Tal se equivocó en el sexto movimiento y estuvo paseándose por la sala diciendo que estaba perdido. Después se acercaba a la mesa y fumaba un cigarrillo tras otro. Fischer conquistó un peón y miró de reojo a Tal. Estaba a punto de ganarle al gran rival por primera vez, y seguramente estuvo acordándose de la última partida del Torneo de Candidatos, cuando tenía la victoria al alcance de la mano, pero que no pudo lograr en parte gracias al juego de farol que llevó a cabo Tal haciendo que Fischer no jugara el movimiento ganador 22.Tae1 (para más detalles y disfrutar de la partida podéis ver la entrada del blog del 29 de junio de 2011, Jugando de farol). Pero en esta ocasión llegó la venganza, en el movimiento cuarenta y siete, Tal firmó la derrota y se oyó un gran aplauso en la sala, mientras Bobby daba tímidamente las gracias.
   Seguidamente podeís reproducir la partida completa:


   Más tarde en la sexta ronda derrotó a Geller, en la decimosexta hizo tablas con Keres y en la decimoséptima venció a Petrosian al que puso en una red de mate. En la sala resonaban el aplauso y los gritos: "¡Bobby!, ¡Bobby!" y el árbitro del torneo, el Dr. Milan Vidmar, agitaba las manos con impotencia, porque el juego seguía en otras cuatro mesas y el público molestaba. Fischer consiguió crear una gran conmoción por la cual ese torneo iba a ser recordado, al ganar a tres grandes maestros soviéticos y entablar con un cuarto. Nadie había conseguido algo parecido antes. Al final Fischer fué segundo en el torneo con 13,5 puntos, a uno del ganador, Mijail Tal.
Después de acabado el torneo emprendió una gira de simultáneas por Bosnia acompañado del ya citado Dimitri Bjelica que cuenta como estando en Liublania, Fischer empezó a encontrarse mal con unos fuertes dolores en el vientre que le obligaron a acudir al hospital. Allí les dijeron que era recomendable trasladarlo al hospital de Banja Luka porque Bobby tenía una apendicitis aguda. Mientras entraban en la ambulancia, llegaron muchos aficionados y Fischer dijo tranquilamente: "-Imagínate, si me muero, ¿quién jugará con Botvinnik?". Para comprender cuanto amaba Fischer al ajedrez y hasta que punto era su obsesión basta decir que mientras la ambulancia corría hacia el hospital de Banja Luka, Bobby apretaba con una mano su tripa y en la otra tenía el libro de Keres "Mis mejores partidas".
Más tarde jugaría el Torneo Interzonal de Estocolmo, en 1962, donde se impuso brillantemente con 2,5 puntos de ventaja sobre los siguientes clasificados, Geller y Petrosian, quien se coronaría campeón del mundo un año después, pero en su posterior participación en el Torneo de Candidatos de Curaçao de ese mismo año sólo pudo alcanzar el cuarto puesto, por detrás de Petrosian, que ganó el torneo, Keres y Geller. Tras este fracaso escribió un artículo muy crítico, donde atacó a los soviéticos, en la revista "Sport Illustrated", por el que le pagaron mil dólares. En dicho artículo afirmaba que en el Torneo de Curaçao había un acuerdo secreto entre los jugadores soviéticos, de modo que ellos dejaban muy pronto sus partidas en tablas cuando jugaban entre sí. De ese modo regalaban uno al otro medio punto. El vencedor del torneo, Petrosian, reunió así, según Fischer, 5,5 puntos de un total de 17,5 que tuvo al final. Además, ellos deliberaban entre sí también mientras jugaban. Cuando Fischer jugaba con un representante soviético, todos estaban viendo la partida y comentaban algo. Por eso consideraba que los soviéticos habían actuado como un equipo aparte.
De este polémico torneo de Curaçao, os dejo a renglón seguido una bonita victoria de Fischer sobre Efim Geller.

Fischer-Geller, Curaçao 1962
 

   Para terminar esta primera parte del homenaje a Fischer, os dejo con unas cuantas posiciones de esta época para que tratéis de emular al gran Bobby.
   La primera de ellas corresponde a la partida Fischer-Sherwin, Campeonato de Estados Unidos, 1957-1958, en donde juegan las blancas. ¿Cómo remató Fischer la faena?


  SOLUCIÓN
1.Txf7!,Tc1+ (Ahora las negras esperaban 2.Tf1+,Rh8 y las blancas no pueden defender ni retirar la torre de 'f1'. Si 3.Te1,Dh4; 4.g3,Txe1+ y si 3.Tg1,Txg1+; 4.Rxg1,Dc1+); 2.Df1!! (Ahora 2...,Txf1+; 3.Txf1+,Dxd5; 4.Txf8+,Rxf8; 5.exd5 con un final ganado),h5; 3.Dxc1!!,Dh4 (Si 3...,Dxc1+; 4.Tf1+ y 5.Txc1); 4.Txf8+,Rh7; 5.h3,Dg3; 6.hxg4,h4; 7.Ae6 y las negras abandonaron.

    En la segunda posición sacada del encuentro Denker-Fischer, Nueva York, 1959-60, las negras juegan y ganan. ¿Véis cómo?


SOLUCIÓN
1...,Td5+ y las blancas abandonaron ya que si 2.Rf6,Dc6+; 3.Re7,Dd6+; 4.Re8,Dd8 es mate.

   La tercera posición pertenece a la partida Fischer-Kupper, Zurich, 1959, y correspondiéndole jugar a las blancas, Fischer remató contundentemente la lucha:


SOLUCIÓN
1.Df5+! y las negras abandonaron. Tras 1...,Rg8; 2.fxg7, seguido de mate.

   En la última posición del enfrentamiento Fischer-Weinberger, Milwaukee, 1957, Fischer, a quien le tocaba jugar, decidió rápidamente el encuentro. ¿Tenéis la misma habilidad que Bobby?:


SOLUCIÓN
1.Dc7+,Rb5; 2.Db7+,Rc5 (Si 2...,Ra5; 3.Td5+ y mate a la siguiente jugada, y si 2...,Rc4; 3.Dd5++); 3.Te5+,Rc4; 4.Dd5++.

   Terminaré esta primera parte del homenaje al inigualable Bobby Fischer con una cita suya: "El ajedrez es asunto de delicada valoración, que requiere saber cuándo hay que golpear y cuándo esquivar".